Prólogo a la primera edición

compa
A Gustavo Zampichiatti, militante de nuestro PST1y del FLH2,
secuestrado y asesinado por la dictadura genocida en 1977.



Presentamos esta edición con un doble orgullo.

En primer lugar, porque este texto es una elaboración colectiva de 24 compañeres lesbianas, gays, bi-, trans-, inter- y también heterosexuales, de modo que acá no sólo expresamos conceptos, categorías y polémicas sino también nuestra participación concreta en las luchas de la comunidad LGBTI e incluso nuestras vivencias personales.

Y en segundo lugar, orgullo porque a todes nos une la militancia feminista disidente y socialista revolucionaria, que entiende nuestra lucha por los derechos sexuales y de género como parte de la batalla de fondo por derrotar este sistema capitalista patriarcal y abrir paso a una nueva sociedad sin explotación ni opresión.

En ese camino, venimos de lograr dos conquistas trascendentes para el feminismo y la disidencia. La principal, histórica, es la media sanción de la ley de aborto en el Congreso, fruto de la marea feminista verde que inunda nuestro país, con las pibas a la vanguardia3. La otra es el fallo judicial por el travesticidio de Diana Sacayán, que por primera vez reconoce los agravantes por violencia de género y odio por identidad de género. A ambas victorias arrancadas a dos poderes del Estado capitalista y patriarcal las une un nexo muy profundo: el reconocimiento a nuestro derecho a decidir sobre nuestros cuerpos. Y como son triunfos de la movilización popular, potencian todo nuestro combate.      

Con el deseo y la convicción de estar haciendo un aporte militante y de interés para todo el activismo feminista y disidente, ponemos este texto a disposición de nuestrxs lectorxs.


Leonel Acosta, Iván Blanco, Nadia Burgos, Daiana Cámera, Mariano Cervantes, Mariana Chiacchio, Jeanette Cisneros, Caro Dome, Micaela Escobar, Raúl Laguna Bosch, Aixa Leguizamón, Guadalupe Limbrici, Marisabel Lombardi, Valentina Milia, Leonardo Rando, Pilar Rey, Luciano Rico, Iara Sepúlveda, Luciano Serra, Rocío Uceda, Camila Vallejos, Aitor Vuoto y Pablo Vasco (coordinador).

Julio 2018

1. Partido Socialista de los Trabajadores, antecesor del MST, Movimiento Socialista de los Trabajadores.     

2. Frente de Liberación Homosexual.

3. En agosto de 2018, el Senado rechazó la ley. La lucha por el aborto legal sigue vigente. 

4.  Barisani, Blas; Formación Moral y Cívica II, Ed. Estrada, Buenos Aires, 1981. También decía: “Dios creó la institución del matrimonio para que los hijos encuentren al nacer todo lo que necesitan hasta alcanzar el normal desarrollo de su cuerpo y la adecuada educación del espíritu”.     

5. Organización Mundial de la Salud.

6. or el genocidio nazi, el peor de la historia, que asesinó a más de 10 millones de personas y provocó la Segunda Guerra Mundial, hubo unos 120 genocidas condenados: una veintena por el Tribunal Militar Internacional de Nüremberg y otro centenar por tribunales alemanes. Por el genocidio argentino, que asesinó a 30.000 personas, a la fecha hay 853 genocidas condenados, todos ellos por tribunales civiles nacionales.     

7. Autoamnistía militar, autojuzgamiento por tribunales militares, juzgamiento limitado a los nueve integrantes de las tres Juntas de Gobierno, fin de los juicios a genocidas, leyes de Punto Final y Obediencia Debida, indultos presidenciales, falsa derogación de las leyes de impunidad y “no oponibilidad” (o sea, sólo regía para genocidios futuros), beneficio de prisión domiciliaria.     

8. A quienes quieran profundizar el tema, les recomendamos nuestro libro Mujeres en revolución. La nueva ola feminista mundial, publicado en 2017, donde analizamos sus características y su dinámica.

9. Reguant i Fosas, Dolores (1996): La mujer no existe: un simulacro cultural, Maite Canal, Ediciones Bilbao, pág. 20.

10. Engels, Friedrich (1884): El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado.

11.  “El período de la creación del patriarcado no se dio de repente, sino que fue un proceso que se desarrolló en el transcurso de casi 2.500 años, desde aproximadamente el 3100 al 600 a.C. Incluso en las diversas sociedades del antiguo Próximo Oriente se produjo a un ritmo y en una época distintos. Por ejemplo, en Babilonia durante el segundo milenio a.C. los hombres controlaban totalmente la sexualidad femenina y aun así algunas mujeres disfrutaban de una gran independencia económica, numerosos derechos legales y privilegios, y ocupaban cargos de importancia en la sociedad”. Lerner, Gerda: La creación del patriarcado. Trad. castellana para España y América: Ed. Crítica, Barcelona, 1990.

12. El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado; F. Engels, 1884.

13. El Estado y la revolución; V. I. Lenin, 1917.

14. Término bíblico utilizado para identificar a las personas homosexuales por entonces.

15. International Lesbian and Gay Association, con sede en Suiza.

16. Antiguos textos hindúes sobre sexo y mitología respectivamente.

17. Faafafine (Samoa), mahu (Hawaii), fakaleiti (Tonga), whakawahine (Nueva Zelanda), akava’ine (Islas Cook), vaka sa lewa lewa (Fiji), rae rae (Tahiti) y fiafifine (Niue).

18. Istmo: historia, tradiciones, mitos y leyendas, Gonzalo Lara López, Ed. Palibrio, EE.UU.

19. Suplemento Las 12, del 23/7/06.

20. Butler, J.; El género en disputa: el feminismo y la subversión de la identidad.

21. Ídem anterior.

22.  Butler, J.; El género en disputa.

23. Butler, J.; Cuerpos aliados y lucha política: hacia una teoría performativa de la asamblea; Paidós básica, 2017.

24. Reportaje en revista Ñ, 8/12/17.

25. Butler, J.; Laclau, E.; Zizek, S.; Contingencia, hegemonía, universalidad, New York, 2000.

26.Bisexualidad, ¿un disfraz de la homofobia internalizada?, Alejandra Sardá. Texto presentado en el I Encuentro Argentino de Psicoterapeutas Gays, Lesbianas y Bisexuales (Buenos Aires, septiembre 1998).

27. Ni confundida, ni en transición: ser bisexual es mi decisión, taller “Mujeres y Bisexualidades”, 26º Encuentro Nacional de Mujeres (Bariloche, 2011).

28. Archivo de la Memoria Trans, estimación a febrero de 2018. No hay registros oficiales, pero todas las mediciones coinciden en que la expectativa de vida es menor a 40 años.

29. La revolución de las mariposas, marzo de 2017, Ministerio Público de la Defensa CABA.

30. Anne Fausto Sterling (2000): Cuerpos sexuados. Trad.: Ambrosio García Leal, Ed. Melusina, Barcelona, 2006.

31. INADI (2012): Derecho a la salud sin discriminación, 1ª ed. En www.inadi.gob.ar

32. Ídem nota 1.

33. Declaración de San José de Costa Rica, marzo de 2018.

34. Guía del uso del lenguaje inclusivo de género; Lillyam Rojas Blanco y Marta Eugenia Rojas Porras. Costa Rica, 2015.

35. En la última edición de su diccionario, de 2014, la RAE tuvo que modificar al menos diez definiciones machistas y además responder ante denuncias de defender la percepción retrógrada que fomenta la violencia de género.

36. Sexo y revolución, Frente de Liberación Homosexual, Buenos Aires, 1973.

37. Historia de la sexualidad; Ed. Siglo XXI, Buenos Aires, Argentina, 2003.

38.Reportaje en el diario español El País, 20/5/78.

39.Art. 5º: “…Cada comunidad educativa incluirá en el proceso de elaboración de su proyecto institucional, la adaptación de las propuestas a su realidad sociocultural, en el marco del respeto a su ideario institucional y a las convicciones de sus miembros”.

40. Resolución N° 45/08 del Consejo Federal de Educación.

41. A cargo del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.

42.  Iem.

43. Decretos-ley Nº 21.540, 21.950, 22.162, 22.430 y 22.950, emitidos desde 1977 a 1983 por la dictadura militar y no derogados por ninguno de los gobiernos posteriores.

44. Clarín, 16/6/18.

45. Estos subsidios, que inició el general Juan Domingo Perón en 1947, luego se extendieron a las escuelas de otras confesiones religiosas y a las del sector privado.

46. roponemos elegir los jueces/juezas y fiscales por voto popular, con mandato limitado y revocable, y juicios por jurados populares. Sobre la policía, proponemos: 1. depurarla de todo implicado en represión o corrupción, 2. jefatura civil, 3. elegir los/as comisarios/as por voto popular, 4. control del accionar policial y comisarías por organismos de derechos humanos, 5. autoorganización vecinal y 6. derecho a la sindicalización para quebrar el verticalismo. En cambio, el PTS y el PO no plantean ninguna propuesta concreta sobre cómo desmantelar el aparato represivo policial.

47. Sectores como las agrupaciones de mujeres del PJ, el kirchnerismo y sus satélites políticos, Nuevo Encuentro, Mala Junta-Patria Grande, PC, PCR, Mumalá-Libres del Sur y otros similares.

48. Ver debate más adelante en este capítulo, La impostura del PO-FIT.   

49. Ver subcapítulo ¿Feministas anti-disidentes?

50.  La Izquierda Diario, 1º/5/18 y 31/5/18.

51. “El giro teórico de las organizaciones gays fue el de presentar una nueva definición: la homosexualidad (y la sexualidad en general) es una cuestión relativa a los derechos humanos, y semejante definición requiere que el Estado deje de tolerarla y la ‘reconozca’ escuchando a los gays”. (Ernesto Meccia, Una historia que recién comienza, 2005)

52. Documento 2017 de Orgullo en Lucha: Colectiva Lohana Berkins, Asamblea Lésbica Permanente, PC, Seamos Libres, ambos Frente Popular Darío Santillán, Mala Junta y otros grupos.

53. La Izquierda Diario, 24/11/16.

54. Prensa Obrera, 9/11/17.

55. Alianza Anticomunista Argentina.

56. Fuerzas Armadas Revolucionarias.

57. Engaño, en inglés.


Capítulo I

Juventud y disidencias



La rebelión disidente

La disidencia sexual y de género es un fenómeno que hoy atraviesa a la juventud, de la mano de esta ola feminista mundial que crece sin parar frente a un capitalismo patriarcal que ya no va más. Para las mujeres y la disidencia, este sistema facho no es más que violencia, opresión, discriminación y explotación.

Hija de un piso de derechos logrado mediante la movilización que durante años desarrolló la comunidad LGBTI argentina, la disidencia hoy encarna una radicalización de la lucha antisistema. Les pibes ya no nos bancamos la imposición de los géneros y sus roles, la heterosexualidad obligatoria y el encasillamiento dentro de un género o una sexualidad determinada.

Partiendo de la base de la identidad -ya sea sexual o de género- como una posición política, nacen un montón de formas distintas de percibirnos desde lo individual: es el caso de les compañeres no binaries, pansexuales, a-género y nuevas identidades que van surgiendo.

Si nos centramos en la identidad de género, podemos entender que no es solo una construcción socio-cultural, sino también una imposición a partir de nuestra genitalidad a fin de asignarnos un rol prefijado en esta sociedad machista. En definitiva, un bajón.

Si nacemos con vagina, tenemos que ser mujeres. Y si nacemos con pene, tenemos que ser hombres. El género es la primera imposición del sistema, el primer eslabón de la dominación, y viene, incluso, desde antes que salgamos del cuerpo de quien nos gesta. La juventud está comprendiendo eso, como comprende también que, más allá del posicionamiento político que implica identificarnos con una sexualidad determinada, hoy es casi irrelevante con quién o quiénes tenemos sexo y de quién o quiénes nos enamoramos. Más que un problema, la sexualidad entre jóvenes es plantarse desde un empoderamiento y una identidad política.

Las, les y los jóvenes luchamos por la real implementación de la Educación Sexual Integral porque la sentimos como una necesidad urgente y vital. Les estudiantes de secundaria somos la vanguardia a la hora de poner el cuerpo en defensa de una educación pública y de calidad, por una educación en la que haya lugar para todes. Que se hable de cuerpos no normativos, de sexualidades disidentes, de sexo con fines no reproductivos, de consentimientos. Que se centre en educarnos correctamente y no en amoldarnos a la hegemonía nene/nena. Y no hay que olvidarse de tantos colegios públicos y también privados laicos y religiosos en donde hacemos pollerazos, pañuelazos por el aborto legal, reclamamos baños sin distinción de género y seguimos tirando abajo los viejos códigos de vestimenta machistas y binarios.

Nuesta masiva presencia en el Congreso, en la cresta de la ola verde por el aborto legal, confirma nuestra determinación.

La onda es dar vuelta todo

A pasos agigantados crece este movimiento que amenaza con fuerza a la cis-heteronorma y al biologicismo, ambos hijos sanos de este sistema. Es decir, la norma que nos impone un género según nuestra genitalidad, asignándonos un rol junto con la heterosexualidad obligatoria y la falsa idea de que nuestro cuerpo determina por completo quiénes somos.

Rompemos con lo que es tipo “correcto”. No nos adaptamos a lo que debemos ser ni parecer, sino que comprendemos que nos vamos construyendo y deconstruyendo a lo largo de toda nuestra vida. Nos rebelamos contra las imposiciones. No nos define nuestro sexo, nuestra expresión de género ni nuestra sexualidad.

Identificamos bien a los enemigos: el patriarcado y el sistema capitalista, cuyas instituciones perpetúan la explotación y la opresión. Tiramos abajo los roles binarios. Hablamos y escribimos como queremos, más allá de la concepción binaria de “lo femenino” y “lo masculino”. Muches de nosotres, también, rechazamos las doctrinas religiosas, porque entendemos a la Iglesia como una institución que fue, es y seguirá siendo enemiga de nuestros derechos.

Somos cada vez más quienes tomamos esta lucha en nuestras manos, en las escuelas, en nuestros trabajos, en las calles, quienes nos posicionamos de este lado de la vereda, del lado de les oprimides. No es copado el escepticismo de quienes nos repiten que es imposible, como si nuestra historia ya estuviera escrita de antemano. Relajen un poco: cuestionar es posible y también necesario.

Queremos arrancar este sistema de raíz. Un sistema que siempre nos va a tener en su lista negra, en el cual nuestra plena libertad sexual e identitaria es la única y verdadera utopía. Entender que el problema viene desde los cimientos nos reafirma en que retocar algunos puntos no basta y que tenemos que ir por todo.


Evolución y raíces

“No existe una esencia de la conducta sexual. 
Solo hay modelos cambiantes en la organización del deseo, 
cuya configuración específica puede ser decodificada”.
 Jeffrey Weeks, sociólogo británico gay.

En líneas generales, la dinámica de la vida sexual suele acompañar los avances y retrocesos de los procesos sociales. Si consideramos el último medio siglo en nuestro país, a grandes trazos podemos describir la siguiente periodización: